Según consta en las diferentes biografías de Arolas que hemos consultado, los guitarristas que secundaron al "TIGRE DEL BANDONEÓN" fueron "El Gallego" Fernández, Ruperto Leopoldo Thompson, Marcos Ramírez, Graciano De Leone (antes de dedicarse a sus instancias al bandoneón) y Pacífico Víctor Lambertucci.
La única referencia a actuaciónes compartidas entre Arolas e Iriarte, se encuentra en la obra de Horacio Ferrer "El Tango, Historia e Imágenes", tomo 1, pagina 349 y según ella habrían tenido lugar entre los años 1910/1915. Ni Héctor Ernié el principal y más calificado biógrafo de Arolas, menciona actuaciones de este con Iriarte, ni este mismo se refirió a ellas en el reportaje que le hiciera Héctor Bates en Radio Belgrano el 13 de Febrero de 1935. Arolas grabó "Comme il Faut" en la faz "A" del disco Víctor Nº72146, en el año 1918, época en la que ya había dejado de lado la guitarra, integrandose su conjunto por él en bandoneón, Rafael tuegols y Atilio Lombardo "El Féretro" en violínes, Alberto Paredes en cello y Juan Marini en piano.
En cuanto al presunto entredicho, cabe señalar que Arolas se radicó en 1919 en Montevideo (R.O.del Uruguay) y en 1920 se dedicó a pasear por Europa en compañía de su amiga Alice Lesage, volviendo en 1921 al Uruguay, donde compuso entonces "La Cachila", retornando definitivamente a Francia donde permaneció hasta su muerte en 1924.
Iriarte y Comparsa Criolla
Rafael Iriarte por su parte, seis años después de la desaparición de Arolas, presentó su tango al septimo concurso del disco Nacional que se realizó en el año 1930 en el Cine "Electric"con la animación de la orquesta de Francisco Canaro, certámen en el que obtuvo uno de los premios "accesit" en la categoría "música sola".
Estos son los antecedentes que pudimos reunir. Ahora el comentario. El libro de Horacio Ferrer pese a sus méritos, esta plagado de errores y su cita se ve relativizada en su valor por el hecho de no mencionar año, lugar y otras referencias acerca de las supuestas actuaciones de ambos. Aparece mas como una elaboración a partir del conocimiento de la existencia de ambas obras y su particular coincidencia.
Debe llamar la atención el hecho de que ni Héctor Ernié, ni el propio Iriarte mencionen tales actuaciones. Queda como un interrogante el hecho de que quienes organizaban los concursos e incluso el mismo Canaro, hayan aceptado la participación de Iriarte con su obra en el certámen conociendo los antecedentes del caso. ¿Deberá interpretarse como una reivindicación de Iriarte acerca de su autoría?.
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